UNA UTOPÍA HECHA REALIDAD

¡GRACIAS DIOS MÍO POR PERMITIR QUE ME TRAJERAN!

Para Paty, Adrianna y Ricardo

  

Dicen que los sueños, sueños son,

Yo puedo garantizar que,

Aún siendo irrealizables,

Se pueden hacer realidad.

 

Un alma llena de pureza, cariño y entrega,

A la que yo llamo “ mí ángel”,

Me habló un día al oído dulcemente

Prometiéndome su esencia y algún día su presencia.

 

Me dio las energías que mí corazón no rechazó,

Las abracé como un ramillete de flores frescas,

Y con sus dulces y armoniosos aromas,

Envolvió mí cuerpo, sanando mí dolor.

 

Fue un 17 de Mayo,

Mes de la Virgen María,

Cuando en mí hogar se presentó,

Trayéndome su corazón aromado

Y en su abrazo el soplo de Dios me envolvió.

 

Me estuvo también hablando,

De una dulce princesita

Que cantaba como los ángeles,

Me contó tantas cosas bellas de ella,

Que mí espíritu se iluminó.

 

Adriana es su nombre,

Y cuando su voz percibí,

Entonando sublimes canciones,

Los ángeles celestiales invadieron mí mente.

 

¡Qué escalofrío sentí!,

¡Qué maravillosa emoción!,

oír la dulce y pura voz,

de la hija de mí frenesí.

¡Si de mí frenesí!,

pues tus padres me han dado el sosiego,

la paz, el cariño y respeto,

cumpliendo todos mis sueños.

 

Me han dado su aliento para seguir,

devuelto el  ansía para luchar,

y lo más exquisito de todo,

me han proveído su amistad.

 

Me he sentido la reina de los más bellos elogios,

Me han envuelto en nubes de serafines,

Me han regalado los más preciados perfumes,

Y devuelto la fragancia del amor.

 

Pues Adriana querida,

tu madre  Paty es “ Mí ángel”,

y tu  padre, Ricardo un verdadero Señor,

con un ímpetu y coraje,

Que a los dos les debo mí recuperación.

  

Con toda mí alma

Katy                                                Madrid, 25 de Mayo de 2006