LAMENTO

 

Ven, siéntate a la vera mía,

No me digas que no lloras,

que mi corazón se va partiendo,

si no ves que comparto esto, con la pena mía.

 ¡Mírame!

Mira a quien bien te quiere

y vete contándome en silencio,

los secretos de tu corazón.

  

Siéntate a mi vera y confía,

que si antaño, todo me lo revelabas,

duro, cruel, todo me lo decías,

¿cómo dudas ahora?.

 

Si no abres tu alma a la mía,

si no te entregas con toda la plenitud del pasado,

todo se irá empañando,

y el dolor aumentarás más cada día.

 

¡Por favor te lo ruego!

Vamos acabar de una vez con esta agonía.

@ Katy Domínguez Gómez